El doble filo de las ideas largas





En el mundo académico existe un culto a la longitud y la envergadura de los pensamientos. Pensamientos sofisticados, con largas premisas. Pensamientos cuyo entendimiento requiere un trabajo intelectual suelen excluir a un gran número de personas, porque las personas que son capaces --o que están dispuestos a tomarse el trabajo-- de seguir un pensamiento largo, son una minoría en el mundo.

No he conocido grupo humano con mayor capacidad de seguir pensamientos complejos y largos como al pueblo judío. Quizás seguido por los ingleses y los norteamericanos. No es coincidencia que los premios nóbel y la mayor parte de la riqueza del mundo esté concentrado en estos pueblos.

Los latinos solemos ser menos proclives a los pensamientos largos, y los meditadores ejercitan extender los espacios en blanco entre los pensamientos, como una manera de entrar en contacto con la divinidad y la paz absoluta.

Dicen los psicólogos ocupacionales y los motivadores personales que cuando se alinean los sueños de la persona con su tiempo productivo, surge la genialidad. Esta es otra forma de llegar a la excelencia, no a través de los pensamientos largos sino a través de la genialidad, de la intuición.


No todo es color de rosa

Sin embargo, si queremos ser críticos con los pensamientos largos, éstos son los que nos tienen atados a un paradigma médico farmatóxico centrado no en la salud sino en la enfermedad. 

Y no solo eso. Los pensamientos largos nos tienen anclados en agricultura a una usanza tecnológica de los años 50 que creía que los químicos serían mejores que la sabiduría de 4.000 millones de años experiencia del Planeta Tiera. 

Y esta lógica de los pensamientos largos se encuentra también en la arquitectura. Vivimos en cajas cuadradas construidas con materiales tóxicos, como si no tuviéramos la capacidad de crear espacios más humanos, menos "pensados". 

Creo q el meollo del asunto es aceptar los pensamientos largos y la inteligencia racional como una poderosa herramienta para sistematizar y ejecutar procesos con asombrosa eficiencia. Pero no es para ponerla por encima de la genialidad, del sentido común, de la intuición.

Uno de los inventos de la mente más peligrosos es que la ciencia no debe estar ligada a la ética. Ese divorcio entre conceptos del bien y el mal de la investigación científica, se ha convertido en el pretexto favorito de los científicos que se dedican a desarrollar tecnologías a espaldas del bienestar humano o del planeta en áreas centrales como que comemos, como nos mantenemos sanos, donde vivimos...

Los pensamientos largos ciertamente ayudan a hacer dinero en el mundo como está concebido ahora. Pero darles más autoridad que al propio sentido común es peligroso. Para mi es la génesis de lo desanaturalizada que es la sociedad moderna. 

Pero al mismo tiempo está surgiendo una nueva generación de activistas y emprendedores en el mundo que está haciendo un cambio visible, con nuevos espacios de convivencia armónica donde prima el respeto y las relaciones de confianza.

Estoy hablando de organizaciones sociales y ambientales, academias de yoga, espacios culturales, hoteles, tiendas con concepto, cafeterías y restaurantes que se alinean con la nueva economía, con un nuevo paradigma de vida donde se actúa con respeto, solidaridad y unas gotas de locura... y con esto toda la interacción social cambia.

Los llamados agentes de cambio son actores sociales o económicos que de una manera u otra impulsan el cambio hacia un mundo más solidario, más humano y más natural. Y que generalmente saben ubicar en su sitio a la mente racional y sus ideas largas.

Lo que hay detrás del cierre de Pachamama



Cada vez más el choque entre el gobierno del Ecuador y organizaciones empuja a posturas más radicales. Aquí, una lectura conciliadora que busca rescatar lo mejor de cada lado.

Organizaciones ambientales manifiestan su inconformidad con el
nivel de diálogo mantenido respecto a la explotación petrolera. 


No estoy de acuerdo con la visión eurocéntrica de la pobreza que sostiene el gobierno ecuatoriano, y que ha llevado a que se vuelva oficial una política depredatoria de la naturaleza. Pero desde que empezó el gobierno de Rafael Correa he sido un sólido defensor de este proceso. 

Ecuador ha dado un giro de 180º en cuanto a institucionalidad, honestidad pública, planificación, repartición de la riqueza e igualdad de oportunidades para la gente. Para lograr esos cambios, hizo falta un talento político y una integridad única. La historia reconocerá a Rafael Correa como un héroe, como el líder que renunció a la riqueza y a aliarse con la clase dominante para mantener su lealtad hacia la gente que lo eligió.

Siempre he defendido que los defectos de nuestro presidente, llámense ser demasiado impulsivo y obstinado, de alguna manera se entienden, siendo alguien que se atrevió a enfrentarse a un status quo que pocos gobernantes en el mundo se han atrevido a desafiar. El mundo de hoy está sometido al poder corporativo. La salud y la alimentación de la humanidad son mercancías y las personas son estadísticas de un mercado.

En EUA, los entes gubernamentales de control se arrodillan ante el aplastante poder de compra de consciencia que tiene el dinero. Una dictadura mediática de información unificada y autocensurada que tolera la enorme corrupción que existe a la hora de determinar qué cosas son aptas para el consumo humano. El poder de la banca a nivel mundial, la gran mentira de las guerras en Medio Oriente y la renuencia de algunos gobiernos a tomar una política ambiental consecuente son indicios de que en muchos países del mundo, los gobiernos todavía representan intereses particulares, no los de la gente.


El crecimiento de la frontera agrícola es una amenaza ambiental más importante
que el petróleo o la minería. Pero no tendría que ser así. Hay técnica ecológicas
de agricultura que consiguen eficiencia creando ecosistemas vivos con mínimo
impacto ambiental.

Alternativas a un estado de bienestar

Ahora bien, no es fácil encontrar un líder suficientemente sensible para tomarse el trabajo de conducir las riendas del estado en beneficio las personas. Ni suficientemente hábil para hacerlo con eficacia (ver el caso de Venezuela o Argentina). Hasta ahí creo que todas las personas que quieren el bien común en el país están de acuerdo con Correa. Las diferencias llegan cuando entramos al tema de la pobreza. Para la derecha la pobreza es un problema que se soluciona con pintura. Para la izquierda partidista la pobreza es su espacio de poder.

Pero otros, si bien es algo que nos preocupa y queremos solucionar, entendemos a la pobreza como la consecuencia de la corrupción y de que el gobierno esté al servicio de los intereses particulares más que del bien común. Pero de ahí hay un paso a decir que el estado está obligado a [explotando recursos naturales no renovables] proveer a la gente de las comodidades de los países industrializados. Esa es la visión del estado de bienestar, que ha sido muy cuestionada con buenos argumentos.

Es incorrecto pensar que el petróleo es el único camino. Es verdad que el crecimiento de la frontera agrícola tiene un impacto mayor que el petróleo, pero así como Ecuador ha sido innovador en manejo económico y democratización del aparato estatal, podríamos innovar y buscar alternativas más allá de la pesada y arcaica agricultura industrial. La agroecología es un conjunto de técnicas que ofrece soluciones tecnológicas para crear ecosistemas naturales productivos que minimizan el impacto y protegen la salud del agricultor y el consumidor. Ecuador podría ser un exportador de productos agrícolas orgánicos con valor agregado.

Necesitamos urgentemente un diálogo desapasionado. Hay otros caminos para llevar al país al siglo 21.

¿Los Himalayas o los Andes? El Haa Valley de Bután. Este país
es famoso por practicar un verdadero Buen vivir. El 60% de su
territorio es área protegida. ¿El secreto? El uso de tecnologías
productivas alternativas que generan abundancia.

La República de Bután es un caso de estudio muy interesante. Es un país donde el 60% del territorio es área protegida, y donde se aplican tecnologías alternativas normalmente ignoradas en los círculos profesionales porque no son negocio para nadie. La sola idea de que son necesarios tantos recursos para estar bien es la visión eurocéntrica con pensamiento racionalista reduccionista que ha creado una economía mundial con procesos lineales y no sustentables. En el nuevo paradigma económico (que Gunter Pauli, consultor del gobierno de Bután, llama Blue Economy) los procesos son circulares y/o sistémicos. En cualquier caso, sustentables y de bajo costo. Este video de tres minutos da más información sobre el concepto de la Economía circular y este sobre las tecnologías de código abierto propuestas por el creador del Blue Economy.

El estado de bienestar no es el único camino para Ecuador. Especialmente si para lograrlo tendremos que seguir explotando los recursos naturales, a pesar de la voluntad de los pueblos en la Amazonía que insisten en que no se explote petróleo en sus tierras. En esta rueda de prensa de julio se ve la postura de las nacionalidades amazónicas ante el petróleo. Un buen recuento de la polémica alrededor de los proceso de consulta previa se puede ver en el micro documental La Consulta Inconsulta.

Gunter Pauli, consultor del gobierno de Bután y creador del concepto del
Blue Economy, ha venido al país, atraído por el proceso ecuatoriano. 


Dónde hemos llegado

El nivel de recaudación fiscal ha subido notablemente; ahora en Ecuador todos pagan impuestos. Tenemos aduanas que sirven y que generan recursos. Son medidas drásticas que nadie pudo tomar en este país, y eso nos tenía sumidos en el más ineficiente subdesarrollo. El presupuesto del estado ya no va a pagar la deuda externa sino al beneficio de la gente. ¿De verdad pensamos que eso no es suficiente? ¿Por qué nos obsesionamos en mejorar en los indicadores de pobreza creados en lugares lejanos a nuestra realidad?

El problema es que los principales actores en este enfrentamiento no tienen confianza en su contrincante. Se ha creado una lucha de poder entre los líderes indígenas y Correa. Las organizaciones no confían en el gobierno, y el gobierno no confía en el liderazgo de las organizaciones. El gobierno acusa a todas las organizaciones de hacer política, pero así como hay organizaciones donde han permeado partidos políticos que defienden espacios de poder, también hay muchas organizaciones de base legítimas, que han venido trabajando silenciosamente por un modelo de desarrollo alternativo.

El turismo comunitario es un buen experimento que ha construido
Buen vivir, ha elevado el nivel de vida, levantado la autoestima
 sin necesidad de grandes inversiones de dinero. 

Por ser escritor de viajes, he tenido contacto en numerosas ocasiones con comunidades donde se practica el turismo comunitario y siempre me asombra el saludable nivel de consciencia de la gente. No se sienten pobres, saben aprovechar los recursos en su entorno, practican una agricultura sustentable, elaboran productos manufacturados con valor agregado, cuidan sus bosques y dan buen uso a los recursos del turismo.

Alrededor del turismo se ven frecuentemente casos exitosos de desarrollo alternativo porque la industria turística, comparada con otros sectores productivos, tiene buenos principios sociales y ambientales. Cuando se capacita a una comunidad para recibir turistas, se suele hacer un trabajo integral, dirigido a empoderar a las personas y volverlos seres conscientes y con valores humanistas. Se les presenta un modelo de desarrollo alternativo al consumismo y la urbanización de sus hábitos de vida. Y esto hace que los comuneros se sintonicen con la sinfonía de la vida. Se vuelven personas conscientes.

Lo esencial para elevar la autoestima y volver a las personas seres conscientes, el turismo comunitario lo ha demostrado, es una adecuada capacitación. No es tan difícil. No es tan costoso.


Algunas verdades sobre el conflicto

Me ha costado llegar a aceptar que el gobierno sí  está cometiendo abusos de poder (aunque me rehusé a creer hasta hace muy poco). No son abusos de poder burdos y escandalosos como los que hace Nebot, pero no por eso dejan de ser abusos de poder. A continuación una lista de algunos detalles del enfrentamiento entre gobierno y organizaciones y del reciente cierre de Pachamama. Espero que nombrarlos aporten a abrir un diálogo sensato.


En la foto, el baile anti Nebot que desencadenaría una brutal golpiza de parte 
de policías municipales.   La policía nacional ha llegado a ser, gracias a Correa, 
profesional y respetuosa de los derechos humanos. Pero  se practica hostigamiento 
de parte de agencias del estado hacia personas inocentes. Y lamentablemente 
existe un sentimiento de lealtad hacia Correa en las cortes. 


1. Están surgiendo muchos oportunistas que por hacer méritos dentro del gobierno se hacen eco de la polémica ardiente entre presidente y organizaciones. Correa debería tener mucho cuidado con acciones que deslegitimizan el proceso e invocar a todos a que se calmen los ánimos.

2. Así como la derecha, en defensa de sus intereses particulares ha hecho una férrea oposición al gobierno, en la izquierda también hay un “status quo” que tenía su espacio de poder en la partidocracia. Haberle quitado a los sindicatos el poder en las empresas públicas y haber despolitizado las universidades fueron medidas históricas de este gobierno en beneficio de la gente. Quienes luchan por la causa ambiental deben tener cuidado de no ser utilizados por la izquierda partidista que tiene su propia agenda de poder.

3. Es difícil precisar quién comenzó, pero el hecho es que Presidente y Organizaciones están absortos en una lucha de poder. Lo curioso es que ambas partes son sensibles y conscientes. Hay politiquería del lado de las organizaciones, así como hay politiquería del lado del gobierno. Lo importante es que ambas partes hagan un esfuerzo por no dejar que la politiquería sea la que maneje la situación sino el diálogo abierto y transparente. Ambas partes deben suavizar posturas y aceptar espacios de diálogo.

4. Estoy firmemente en desacuerdo con el cierre de la fundación Pachamama y con el hecho de que cada vez el aparato estatal se vuelva más hostil contra quienes protestan por los derechos de la naturaleza. Aunque tengo claro que generalmente es a espaldas de Correa. Funcionarios aduladores que quieren hacer puntos. Pero entiendo de dónde viene todo esto. Para Correa es tan importante el imperativo de superar la pobreza que le parece secundario si hay que comprometer la naturaleza. Eso legitimiza [equivocadamente] una lucha en la que el gobierno está usando métodos de represión legales pero ilegítimos, que desdibujan la figura de Correa como un líder que no se casa con doctrinas ni bandos. Esto se ha convertido en una lucha de poder.

5. Otro punto de conflicto con las organizaciones es la fijación que tiene Correa con que la eficiencia del estado reemplace las a veces corruptas estructuras de las organizaciones civiles. Parte del estilo iconoclasta de Correa es que su gobierno se dirige a la gente, no a los dirigentes. Pero esa rebeldía contra el orden establecido está bien en la medida en que se enfrente a entes que no representen a la gente, pero aquí se está cuestionando también el trabajo de las organizaciones de base. Se está perdiendo el rumbo de lo que posiblemente fue en sus inicios una buena visión.

Las ferias ciudadanas que instituyó este gobierno son un ejemplo de
una política pública enfocada en soluciones creativas a los problemas
de la gente. Las ferias acercan al productor y al consumidor, abaratando
costos y generando consciencia e intercambio de saberes. 

6. Oponerse a un estado de bienestar, para una visión políticamente correcta, es sinónimo de ser reaccionario. Sólo eso explica que nuestro presidente se haya convencido que Pachamama es una organización política que busca frenar el proceso revolucionario que vive el país (como dijo en el enlace del último sábado). Pachamama tiene más de 15 años de trabajo encomiable en defensa del medio ambiente de los abusos de las petroleras. Esta ONG fue fundada por un grupo de norteamericanos, amantes de la naturaleza, que juraron a una comunidad Achuar, luego de profundas y transformadoras experiencias en ceremonias con plantas de poder, que conseguirían recursos de donaciones en EUA para defender la Amazonía.

7. Pachamama es un contrincante difícil del gobierno en esta lucha de poder, tanto por su calidad moral como por estar desalineada del juego político. Pero también porque, al recibir fondos de donaciones de personas que quieren proteger la Amazonía, se han hecho sentir, a través de investigaciones, recorridos, movilizaciones, festivales de cine y capacitaciones para empoderar a los campesinos amazónicos en su relación con el medio ambiente. Necesitamos más actores como éste, no menos.

8. La campaña que ha desatado el gobierno de pretender que Pachamama hace política es insincera. Si “hacer política” es aprovecharse del miedo de la gente al petróleo para desprestigiar y desestabilizar al gobierno, nada más alejado de la realidad. Puedo dar fe, a través de las personas que conozco que colaboran con esta organización, que son gente auténtica que lucha por sus ideales; no he visto gente reaccionaria ni fanáticos contra el proceso.

9. Aquello de que si este gobierno no explota petróleo, lo hará el siguiente es una verdad a medias. Cada vez hay más consciencia ambiental, cada vez más la humanidad descubre nuevas tecnologías que no son muy conocidas en los círculos profesionales porque no son negocio para nadie. Si este gobierno, en lugar de explotar petróleo, sigue usando el aparato estatal para repartir mejor los recursos, en pocos años no tendremos pobreza extrema ni la necesidad de explotar recursos no renovables.

Hay gente que vive por debajo del límite de la pobreza y necesita
atención del estado, pero eso no tendría que costar tanto. No debería
ser tan importante cumplir con los criterios de eliminación
de la pobreza de la ONU.

10. Las organizaciones no deben perder de vista que Correa ha recibido una crítica muy áspera, con métodos ilegítimos, proveniente de la derecha y el establishment político. Estoy seguro que muchos de los casos que se han denunciado como violaciones a los derechos humanos o abusos de poder no lo son en realidad. Son manipulaciones mediáticas. Hay que comprender que tanta crítica causa estrés, agita ánimos. Es importante que gobierno y organizaciones abran un canal de comunicación y que busquen un consenso en temas ambientales. Seamos más creativos, busquemos nuevas opciones de productividad.


En conclusión…

Sigo pensando que Correa anhela que en su gobierno haya democracia participativa y respeto a los derechos humanos. Pero confundir la postura anti petróleo con anti revolucionario es un grave error de cálculo que está haciendo cometer al gobierno abusos que seguramente Correa nunca imaginó que habría en su mandato. Este debería ser un momento de reflexión para nuestro presidente. La ola de críticas que ha despertado el  tema del Yasuní y el cierre de Pachamama dan para meditar. ¿Se justifica realmente esta guerra? ¿No ha logrado su gobierno ya un nivel decente de igualdad y oportunidades? Los últimos 70 años son una historia de depredación ambiental en Ecuador, pero lo estamos queriendo legitimizar. Eso es lo moiesta a mucha gente.

Contrario a lo que repite Correa, el resultado de las últimas elecciones no significa
que el pueblo quiere la explotación petrolera. Conozco mucha gente que votó
por él por la calidad de su gestión pero discrepa con su política ambiental. 

Casi cualquier gobierno del mundo haría lo que está haciendo el gobierno ecuatoriano. Pero no tenemos un gobierno cualquiera. Tenemos un gobierno que ha sido capaz de romper el molde [como diría Giovanna Tassi] en muchos otros aspectos. 

Las personas sensibles del país esperamos que Correa sea fiel a sus principios y abandone la pugna política. Si se mantiene el cierre a Pachamama sólo se agravaría el conflicto.



Petróleo o pobreza: ¿un falso dilema?


Técnicas y prácticas que podrían sustituir, en parte, los ingresos del extractivismo de recursos no renovables. Aquí, un análisis propositivo.




Como en Ecuador hoy está de moda ser ecologista, últimamente se escucha mucho el argumento de que en vista de que 40 años de petróleo no han mejorado la calidad de vida de los ecuatorianos seguir explotándolo no es una buena idea.

Este argumento está construido sobre una falacia, pues olvida que el manejo de los fondos públicos se ha vuelto sustancialmente más eficiente y transparente durante el gobierno de Rafael Correa.

Por primera vez en el país un gobierno se ha tomado la molestia de renegociar contratos petroleros en condiciones favorables para la gente. El excedente petrolero producto de las fluctuaciones en el precio ya no van a pagar deuda externa sino a construir escuelas, hospitales y carreteras.

El petróleo, por primera vez desde 1973, está siendo usado para microcréditos y para volver a Ecuador a un país con una mano de obra altamente calificada a través de abundantes becas y una educación pública de calidad.

Pero hay un problema.

Explotar, aunque sea el 0,1% de un Parque nacional Reserva de la Biósfera –y uno de los poquísimos reductos de bosque primario en el país– es dejar una puerta abierta para que éste o futuros gobiernos sigan incursionando en áreas protegidas a medida que lo exijan sus demandas económicas.

Si el petróleo fuera el único camino para erradicar la pobreza, sería penoso pero justificable explotarlo. De hecho, estoy de acuerdo con nuestro presidente en que si hay que elegir entre el ser humano y la naturaleza, primero es el ser humano. Pero, como analizaremos en este artículo, es posible de que se trate de un falso dilema.

A continuación enumeraré algunas alternativas al extractivismo de recursos no renovables en términos de ahorros y generación de recursos. Quizás son propuestas que nunca llegarán a generar abundancia financiera al nivel del petróleo o la minería, pero justamente la propuesta del Buen Vivir implica evolucionar como sociedad pero sin transitar por el mismo sendero del consumismo y la exterminación de la naturaleza de los países hoy desarrollados.


Ecuador tiene los recursos naturales y el talento humano para convertirse en un centro mundial de medicina natural. Esto sería muchísimo menos costoso para el estado y un gran generador de bienestar para la población.
1. Medicina

El Estado podría ahorrar algunos millones de dólares al mes en medicina si la salud pública fuera más integral y menos fiel a la industria médica mundial.  La Constitución de Montecristi declara la atención primaria (preventiva) como política de Estado. Pero es una práctica que todavía no se cumple.

El problema es que la salud pública de la mayoría de los países, incluyendo Ecuador, está basada en un fiel seguimiento a la medicina farmacológica, la que se practica en los hospitales, lo aceptable para el Establishment médico. Este es un gremio usualmente formado en la visión reduccionista que ve al ser humano como una entidad mecánica que se cura con [costosas] sustancias químicas. En lugar de empoderar al propio paciente como el principal artífice de su propia salud, lo vuelven dependiente de químicos que usualmente causan daño mientras curan.

La medicina china (incluida la acupuntura), la medicina ayurvédica, la homeopatía, la herbolaria y la medicina andina, entre otras escuelas médicas [mal] llamadas complementarias, tienen en común que ven al ser humano como una integralidad mente-cuerpo. Ellos basan las terapias de sanación en buscar los orígenes del desequilibrio orgánico que devino en enfermedad. Ven al organismo es un ente complejo en cuya salud influyen mucho factores intangibles que la medicina moderna usualmente pasa por alto, en su afán de buscar soluciones rápidas. Estados Unidos es un referente a nivel mundial de una sociedad donde domina la medicina farmacológica. Es uno de los países que más gasta en atención médica pero que tiene los indicadores más bajos en salud en comparación con otros países industrializados.

En Ecuador tenemos el talento humano capaz para desarrollar una política de salud pública centrada no en el capital sino en el ser humano, dando opciones a la gente de qué tipo de medicina prefiere usar. Hay un proyecto no muy sonado en el Ministerio de Salud desde gobiernos anteriores que consiste en la creación de dispensarios multidisciplinarios.

Salud y Ambiente, un grupo de trabajo adherido a la Fundación Cerro Verde, tiene un programa de salud alternativa basada en una combinación de sabiduría ancestral de la costa ecuatoriana con técnicas de vanguardia. Han venido desarrollando con éxito un proyecto en el Golfo de Guayaquil de dispensarios comunitarios en conjunto con el Ministerio de Salud.


Feria agroecológica en Loja. La agroecología es una interesante alternativa integral a los postulados de la industria alimenticia. Ahorra recursos y genera bienestar para campesinos y consumidores. 
2. Alimentación

La mayor parte de la publicidad en el mundo gira alrededor de las ventas de alimentos procesados. No es coincidencia que la Mass Media mundial practique una natural lealtad hacia ese poderoso conglomerado industrial.

Esta lealtad ha dado lugar a un cerco mediático alrededor del hecho que usualmente los alimentos frescos y naturales son mucho más saludables que los alimentos procesados. O del hecho de que la eficacia de la agricultura moderna y la revolución verde han sido ya ampliamente superadas por técnicas más sostenibles, más sistémicas y menos agresivas.

Pero los medios han convertido en dogma de fe que la única agricultura eficiente es la agricultura moderna. Sin embargo, hay evidencia científica que demuestra lo contrario. El Rodale Institute de Pennsilvania se ha dedicado a realizar estudios que miden la eficiencia de diferentes técnicas de cultivo que apuntan a que las áreas de cultivo sean ecosistemas autosustentables y con defensas propias contra males y plagas. Estos cultivos agroecológicos son en muchos casos igual de eficientes que los agroindustriales.

Es hora de empezar a tomar en cuenta factores tradicionalmente considerados exógenos en la ecuación agrícola, como los costos de atención médica del agricultor y del consumidor, el surgimiento de desiertos verdes y la pérdida de suelo cultivable por desgaste causada por los agrotóxicos. Considerando esos factores, la agricultura moderna se desvela como un conjunto de técnicas de dudosa eficacia.

Es hora de replantear el contenido de la canasta básica familiar eligiendo técnicamente alimentos sanos y con óptimo contenido nutricional, antes que tomando en cuenta lo que beneficia a la industria. Hay ingredientes altamente nutritivos que se dan en nuestras tierras como la quinua, el fréjol tumbes o el amaranto. La spirulina ha sido usada con mucho éxito en Cuba como una fuente alimenticia de bajo costo y altamente nutritiva. Usando estos ingredientes sumados a los convencionales pero cultivados sin químicos se podría crear una nueva canasta básica familiar más económica y mucho más nutritiva que la actual.


Hacienda agroecológica exportadora de banano en Vinces. La agroecología propone recrear los ecosistemas naturales en los cultivos, para aprovechar así los agentes naturales que mantienen el equilibrio biológico en la naturaleza. De esta manera se evita el uso de plaguicidas y fertilizantes tóxicos.
La soberanía alimentaria, un principio constitucional que todavía no se aplica, habla del derecho de los campesinos a elegir alinearse o no con los métodos de la agroindustria. Sin embargo, en Ecuador si un campesino decide no usar los métodos convencionales no tiene facilidad de acceso a los créditos de la banca pública. Por otro lado, los subsidios y las exenciones van siempre dirigidos a beneficiar a la agroindustria.

En la Asamblea ecuatoriana se debate en estos momentos una propuesta de ley llamada de Semillas y Agrobiodiversidad que propone revertir la situación actual y distanciar la política de estado de los dictámenes de una gran industria. Habla también de sistemas de distribución solidarios y que facilitan el contacto directo del agricultor con el consumidor. En Ecuador (y a nivel mundial) proliferan cada vez más ferias campesinas que permiten trasladar al agricultor la onerosa utilidad de los intermediarios. Pero el marco legal actual no facilita esta nueva modalidad de comercialización.

Hay numerosas fincas y centros agrícolas que usan métodos agroecológicos que ostentan niveles ejemplares de bienestar. Estas unidades productivas se agrupan a través de organizaciones como la Red Unorac en Cotacachi, la Pacat en Tungurahua, Fecaol en Guayas, la Red Agroecológica del Austro en Azuay, entre otras redes regionales en el resto el país.

Como no podría ser de otra manera, esta ley enfrenta una cruenta oposición de la industria alimenticia, que vería afectados sus intereses económicos con una ley de esta naturaleza. Hace falta un gobierno revolucionario para cuestionar el sentido común corporativo, que insiste contra todo análisis en que la agricultura moderna es más eficiente que la agroecología.



El turismo comunitario tiene el potencial de ser un importante generador de recursos para comunidades rurales, así como un fuerte gancho para atraer turistas. El problema es que el turismo comunitario en Ecuador no se ha sabido vender. Esta situación se podría resolver si el gobierno afianzara su rol de enlazador entre la capacidad de marketing de la empresa privada y la originalidad y atractivo que es un turismo comunitario bien manejado.  En la foto, Agua Blanca, Manabí, una comuna que ha vivido un gran desarrollo gracias al turismo comunitario.

3. Turismo

El presidente está muy en lo cierto al advertir que el potencial turístico del Yasuní es muy limitado, por ser un frágil ecosistema. Al igual que Galápagos, las reservas naturales están llamadas a recibir turismo, pero en pequeñas cantidades, así que no es correcto decir que el turismo es un sustituto para el petróleo en el Yasuní.

El Plan Nacional de Turismo ha definido el tipo de visitante que quiere el país: gente educada, respetuosa de las diferencias culturales y amante de la naturaleza. Es un segmento apetecido por todos los países, por su alto nivel de consumo. Son muchos países atrás de los mismos viajeros.

Haber definido como política de Estado el turismo consciente fue una excelente estrategia para atraer este tipo de visitantes, pero si Ecuador renuncia voluntariamente a explotar petróleo en sus parques nacionales, eso sería mejor publicidad que cualquier campaña.

Imaginen una verdadera sociedad del Buen Vivir, donde a más de todos los logros sociales que este gobierno ha conseguido, los alimentos son sanos y puros, la medicina proviene de una ciencia con consciencia y los parques nacionales se respetan. Ciertamente ese sería un país único en el mundo y muchísima gente de ese target querría visitarnos.

La política pública de apoyar abiertamente con microcréditos al emprendimiento turístico del gobierno es muy acertada. Es la mejor manera de asegurar que el crecimiento turístico del país sea con pequeños emprendimientos antes que con grandes resorts. La gente es más feliz cuando maneja su propio emprendimiento que cuando es empleada.  Y los viajeros del tipo que queremos atraer valoran mucho más la diversidad que ofrecen los emprendimientos pequeños antes que la uniformidad y estandarización de los grandes hoteles.

El turismo comunitario, un área donde ostentamos un liderazgo a nivel mundial, es una de las fortalezas del Ecuador como destino turístico. Es además un excelente generador de bienestar y avance social, además de un valioso agente de protección al medio ambiente. El problema con el turismo comunitario es que no se sabe vender. El estado podría adoptar un rol de eje entre la capacidad de mercadear productos que tiene la empresa privada y la riqueza de producto que ofrece el turismo comunitario.


Gunter Pauli es el creador de la Economía Azul, un conjunto de tecnologías sistémicas de mínimo impacto ambiental y de bajo costo de implementación. Luego de muchos años de golpear sin éxito las puertas de corporaciones, su estrategia ahora es dirigirse a los gobiernos. Hace falta un gobierno revolucionario para aceptar tecnologías que a menudo desafían el sentido común de los expertos.
4. Tecnologías revolucionarias

El compás del ritmo del avance científico en el mundo lo marcan hoy en día las grandes corporaciones. Pero el sector privado no es la panacea de innovación que la cosmovisión neoliberal quiere retratar. Las corporaciones suelen ser entes muy conservadores en cuanto a lo que ya funcionó y lo que genera dinero  rápido con una mínima dosis de riesgo para los CEOs de turno. Esto sin mencionar la natural resistencia que tienen las corporaciones contra tecnologías diferentes que amenacen su modelo de negocio actual.

Existe un amplio espectro de tecnologías muy interesantes que están listas para ser desarrolladas. Pero que al no son negocio para nadie no resultan muy interesantes para el mundo corporativo, lo que las vuelve una propuesta ideal para un gobierno revolucionario. Hay un grupo propositivo llamado Blue Economy, que se ha tomado el trabajo de reunir tecnologías que cumplen tres características: (a) ser de bajo costo de implementación; (b) ser sistémicas; (c) basarse en principios físicos más que químicos.

Al basarse más en métodos físicos que químicos son más sostenibles y menos tóxicas para el consumidor pero rompen demasiados paradigmas para ser aceptadas por el Establishment científico. Al ser sistémicas generan riqueza donde la tecnología actual solo ve basura.

Y al ser de bajo costo de implementación no son atractivas para los potenciales inversores que podrían desarrollarlas, pero son muy eficientes para resolver problemas sociales y ambientales. Además, generan abundantes oportunidades de negocios para microemprendedores.

Entre estas tecnologías está el desarrollo de combustible con algas (mucho más rendidor y ambientalmente amigable que usar caña); el cultivo de hongos nutritivos en desperdicio de café; elaboración de papel con desperdicio de caña; fabricación de teléfonos móviles y relojes que funcionan únicamente con la energía del cuerpo humano; elaboración de bloques de construcción con vidrio reciclado; plantas purificadoras de agua con gusanos; extracción de minerales a partir de chatarra tecnológica; un antibiótico de bajo costo con ultrasonido y un desinfectante natural y gratuito elaborado con larvas de mosca, entre muchas otras.

El cerebro detrás de Blue Economy es un visionario belga llamado Gunter Pauli, que es consultor del gobierno de Bután. Este un país que ha solucionado muchos problemas socioeconómicos usando innovaciones no muy sonadas en los medios comerciales. El gobierno de Bután ha logrado el milagro de desarrollar su país sin necesidad de echar mano de los recursos naturales (más de la mitad del territorio de Bután son zonas protegidas).


En conclusión...

Estas son sólo algunas ideas que buscan abrir un debate sobre alternativas al extractivismo. No soy economista y tampoco me he tomado el trabajo de cuantificar el rendimiento de los planteamientos que acabo de hacer y compararlos con los réditos que podría dejar el extractivismo.

Es posible que si se apliquen algunas de las recetas que presento en este artículo, el ingreso per cápita de los ecuatorianos no llegue al nivel que generaría una explotación socialista de recursos naturales.

Pero lo que sí creo que debería ir a debate es en qué medida los ecuatorianos queremos que Ecuador se vuelva un país rico, aun si esto significa poner en riesgo las pocas áreas naturales que nos quedan. Es posible que baste con los recursos generados por la eficiencia y transparencia que ahora existe en recolección fiscal, aduanas, compras públicas y en general en el manejo de los fondos públicos.

Estamos en un nuevo país, con un sistema judicial más justo para el ciudadano de a pie. Hemos presenciado una reingeniería de procesos en el sector público  que está dando a luz a una generación de servidores públicos con mística de servicio. Se está reestructurando la educación pública, las redes viales del país. ¿No será que con esto basta?

A menudo la respuesta de nuestro presidente es que “los pobres merecen lo mejor”; y tiene razón. Pero me parece más digno, más constructivo y más respetuoso al medio ambiente no dar a los pobres alcantarillado y agua potable con fondos del Yasuní, sino más bien crear entornos productivos usando nuevos paradigmas que les permitan a estas personas desarrollarse ellas mismas y generar recursos para financiar su agua potable y alcantarillado.

Es verdad que una transformación así no tomará 6 sino 16 años. Pero será un cambio más orgánico y armónico.  Está bien que tengamos prisa para solucionar los problemas del país. Pero en este caso está en juego la vida de una de las pocas reservas de la biósfera en el mundo. Y hasta ahora no se conoce de un ejemplo de explotación petrolera que no traiga secuelas; el petróleo no perdona.

Conozco algunas personas que apoyaban la gestión de Correa se han decepcionado con su postura ante el Yasuní. Yo no me he decepcionado, porque a una persona se la juzga por el conjunto de sus acciones, y no sólo por una. Pero sí creo que nuestro presidente debería pensar dos veces en qué medida es adecuado que sigamos con la destrucción y el extractivismo de toda la vida.

Quienes vivimos en las ciudades a menudo nos desconectamos de nuestra esencia, que está muy ligada en un plano muy profundo con la naturaleza. No desoigamos tanto a quienes no han perdido esa conexión y mantienen el nexo ancestral con esa madre que ha albergado a nuestra especie desde tiempos inmemoriables. Ecuador tiene la oportunidad histórica de dejar un valioso legado planetario de un modelo de desarrollo sin riquezas y sin abundancia pero con mucha dignidad y respeto por la vida en todas sus formas.


PUBLICADO EN GKILL CITY EL 9 DE SEPTIEMBRE DE 2013